La Mente de Cristo

Dennis F. Kinlaw es un reconocido teólogo y educador estadounidense, famoso por su obra en el campo de la teología y su enfoque en la relación entre la fe y la experiencia cristiana. Nacido en 1932, Kinlaw creció en un contexto que fomentó su interés en la religión y la espiritualidad desde una edad temprana.

Se graduó de la Universidad de Asbury y continuó su educación en el Asbury Theological Seminary, donde desarrolló una base sólida en teología y estudios bíblicos. A lo largo de su carrera, Kinlaw se destacó no solo como profesor, sino también como líder dentro de la comunidad metodista y como autor de múltiples obras que abordan la experiencia espiritual y la vida cristiana.

Uno de los aspectos más destacados de su vida académica fue su papel como presidente del Asbury College (hoy conocido como Asbury University) de 1968 a 1970, donde implementó diversas reformas educativas que ayudaron a modernizar el currículo y a fomentar un ambiente de aprendizaje más inclusivo y diverso.

Kinlaw es conocido por su enfoque en la santidad cristiana y cómo esta puede manifestarse en la vida diaria de los creyentes. Ha sido influenciado por el movimiento de la teología de la santidad y ha trabajado para promover la comprensión de esta experiencia entre los laicos y los líderes eclesiásticos. Su entusiasmo por la enseñanza le ha permitido impartir cursos en diversas instituciones y ha sido un orador solicitado en conferencias y encuentros cristianos en todo el mundo.

Entre sus publicaciones más notables se encuentran obras que exploran temas como la gracia, la redención y la vida cristiana auténtica. A través de sus escritos, Kinlaw ha buscado brindar no solo un entendimiento teológico, sino también una aplicación práctica que permita a los creyentes vivir de acuerdo a los principios de su fe.

A lo largo de su carrera, ha sido un defensor del diálogo entre diferentes tradiciones cristianas, fomentando la unidad y la colaboración en el ámbito del cristianismo evangélico. Su enfoque inclusivo ha resonado con muchos, y ha jugado un papel crucial en la formación de nuevos líderes dentro de la comunidad cristiana.

En su vida personal, Kinlaw ha sido un modelo de devoción y compromiso, tanto en su papel de educador como en su vida familiar. Ha sido un mentor para muchos estudiantes y ha dejado una huella indeleble en quienes han tenido la oportunidad de conocerlo.

En resumen, Dennis F. Kinlaw es una figura prominente en el ámbito teológico estadounidense, cuya labor ha impactado a generaciones de creyentes y líderes en la iglesia. Su legado se mantiene vivo a través de sus enseñanzas, escritos y el ejemplo de vida que ha compartido con aquellos que han tenido la fortuna de cruzarse en su camino.

He aquí el ensayo de un jesuita de 75 años que buceando en su interior hacia esa realidad última, interior intimo meo en palabras de San Agustín, escribe sus «Memorias sobre Dios». «Vale la pena intentar, en este momento final de mi vida, plasmar una especie de esbozo de mi actual concepción de Dios, después de tres cuartos de siglo de tantas otras intentonas pasadas. Seguro que, cuando me llegue la hora de traspasar el telón de tiempo, comprobaré por experiencia lo que ya ahora sé, que esa mi actual concepción de Dios dista infinitamente de la Verdad. Con todo, repito, vale la...

Es común hoy en día escuchar a la gente decir que solo creen en la ciencia; el ateísmo (Dios no existe), el agnosticismo (si Dios existe es imposible conocerlo), el panteísmo (el mundo y Dios son lo mismo) y el deísmo (creencia de que Dios existe y creó el universo físico, pero no interfiere con él) intentan usar el conocimiento científico para apuntalar sus creencias. Sin embargo, a pesar de ciertas contramarchas, la ciencia va en dirección contraria, apunta en el mismo sentido que la fe judeo-cristiana, revelada en la Biblia. En este libro el autor muestra como tanto desde los...

Aunque Dios no necesita de nuestros bienes, cuando él nos pide algo es porque anhela darnos más, pero con su bendición. Cuando le entregamos al Señor las primicias, la parte restante es bendecida. Sin embargo, ten en cuenta que antes de que Dios otorgue subendición, siempre te pedirá que le entregues lo primero en todos los ordenes de tu vida. No hay espacio para las especulaciones. Entrégale hoy tus primicias a Dios.

Qual’è il senso della nostra vita? Per cosa viviamo? Sono domande che spesso restano senza risposta. Non si tratta di domande secondarie, ma vitali e trascendenti. A maggior ragione, se intravediamo la sua risposta: come muoverci verso lo sviluppo della nostra identità? Come sentire che cresciamo e ci rendiamo conto di essere sempre più pieni? Oggi più che mai, in mezzo a una società che ci spersonalizza e ci trasforma in soggetti anonimi di una massa, abbiamo bisogno di conquistare noi stessi a partire dal nucleo della nostra personalità. Dio ci ha creati esseri unici, ma soggetti...