Pollita Chiquita

Para Mariuchi llegó la hora del día en que los sueños se vuelven protagonistas y se toman de la mano con la imaginación. Pero esta hermosa niña, hoy, no podrá acostarse. ¿Será posible? Hay un ogro sentado en la cama de Mariuchi. El ogro no para de llorar. Grandes charcos de lágrimas se ven por todo el suelo y una almohada está empapada. Para cualquiera sería un problema aquel ogro tan enorme, pero no para Mariuchi; la niña sabrá que hacer para dar con la causa de su dolor

Los cuentos de animales pequeños (ratones, hormigas, escarabajos…) que eligen a un esposo por el sonido de su voz están particularmente extendidos en los países mediterráneos. En esta adaptación una ratoncita coqueta –después de haber rechazado a varios pretendientes– encuentra la voz del gato como la más atractiva y decide casarse con él. ¿Pero será ésta una buena idea?

1961, Berlín está dividida. Julian Niemöller vive en Berlín del Este y trabaja del lado Oeste, en donde están sus amigos y su novia. Cuando cierran la frontera, se ve obligado a tomar una decisión drástica. Años después, sus sobrinos Marthe y Florian sufren las consecuencias de cuestionar el régimen socialista. En 1989, Sybille, la menor de los Niemöller, es testigo de la caída del Muro de Berlín, de la apertura de las fronteras y descubre dolorosos secretos de su familia. Esta novela nos muestra ágilmente tres generaciones marcadas por la guerra y por un mundo dividido en dos...

The seven brothers are precursors to the modern comic book super heroes that are so popular. Each has an unusual skill. The first has remarkable hearing. The second can see over vast distances. The third has unusual strength. The fourth has bones of iron. The fifth has legs that can grow as long and thick as tree trunks. The sixth brother can never be too hot. The seventh brother can cry such large tears that they can drown an entire village. Much effort goes into keeping him happy. The key to the story is that they look alike. The Seven Chinese Brothers is for children who are past the time...